Cuando las monedas de chocolate se convirtieron en monedas de oro
Hace ya algunos meses, hablábamos sobre el chocolate y sus “beneficios”. De cómo ayuda a mantener el cuerpo y la mente, eso sí, siempre y cuando se trate de chocolate negro y con más del 70% de cacao.
Pues ahora dejaremos a un lado sus propiedades para centrarnos en hablar de su precio. Así, sin rodeos. Y es que según John Mason, fundador de la organización Nature Conservation Research Council, en 20 años una barra de chocolate costará en torno a $11. Y ahí es donde surge una reflexión: ¿llegará el chocolate a convertirse en un bien reservado exclusivamente para las clases sociales altas?
En palabras de Mason, “se volverá tan raro y tan costoso que un ciudadano promedio no podrá darse el lujo de adquirirlo”.
El principal problema es que el nivel de consumo de cacao es muy superior a las posibilidades de producción del mismo, lo que, unido a las dificultades para cultivarlo (sólo puede cultivarse en latitudes ubicadas a diez grados del ecuador) y al abandono de los productores de cacao por parte de las autoridades locales, hacen que su precio continúe aumentando constantemente.
De todas formas, algunas compañías ya se han puesto manos a la obra para asegurar un suministro sostenible, aunque existe un problema: la rentabilidad.
El cultivo de cacao compite en espacio con el cultivo de otros alimentos como el maíz, la soja o el aceite de palma, alimentos que, además, pueden convertirse en los biocombustibles del futuro.
Por todo esto, y antes de que las monedas de chocolate se conviertan en monedas de oro, aprovechemos para seguir seduciendo a nuestras bocas y cuidando nuestra salud.
Fuente: The Independent