Cuando los dientes negros eran símbolo de belleza
Hoy en día, lucir una blanca y hermosa sonrisa es una de las mayores preocupaciones en cuanto a salud y estética dental. El blanco significa limpieza y cuidado de la salud bucal, pero no siempre fue así. Hubo un tiempo en el que las mujeres japonesas de las clases sociales más altas teñían sus dientes de negro para embellecer sus sonrisas.
Esta tradición formó parte de la cultura japonesa durante siglos. Se conoce como Ohaguro a la técnica que teñía de negro los dientes. El tinte, elaborado con óxido de hierro, sake y té, debía aplicarse sobre los dientes con frecuencia para mantenerlos lo más oscuros y brillantes posible. Además de un motivo estético, también se creía que al teñir los dientes se combatía la aparición de caries ya que actuaba como un sellador.
Las mujeres adultas de las clases sociales más altas ennegrecían sus dientes porque en aquella época el negro era un color asociado a la elegancia y para la aristocracia era un símbolo de belleza y poder. En su inicio, sólo las mujeres de la nobleza podían teñir sus dientes, pero más adelante también los hombres optaban por el Ohaguro. En la época Edo (1603-1868), era una tradición estrechamente ligada a las bodas, por lo que era habitual ver a las mujeres casándose con los dientes teñidos de negro. No fue hasta la era Meji (1892-1912) cuando se abandonó la tradición de teñir los dientes de negro.
Esta costumbre es un ejemplo más de la importancia que la estética y la salud de los dientes han tenido desde hace siglos. No estamos muy seguros de que el tinte negro les sentara muy bien, pero como ya se sabe, sobre gustos no hay nada escrito.