Que los años no pasen para tu sonrisa
Con la edad, tu cuerpo va cambiando y las necesidades de tu salud bucodental también. Para que puedas seguir luciendo tu mejor sonrisa, te proponemos una serie de consejos que te ayudarán a mantener tu boca sana durante más tiempo.
Los años te aportan experiencia, conocimientos y tranquilidad pero, a partir de cierto momento, pueden llegar acompañados de cambios fisiológicos capaces de afectar a tu salud bucodental. Afortunadamente, la prevención y una higiene dental adecuada te ayudarán a proteger tu boca para que el calendario no consiga robarte la sonrisa.
Índice de contenidos:
¿Cómo afecta la edad a tus dientes?
Para poder ponerles remedio, es importante conocer las dolencias más habituales a las que se enfrenta la boca con el paso de los años.
- Sequedad bucal: la saliva juega un papel fundamental como protector frente a las enfermedades bucales pero, con el tiempo, su producción tiende a disminuir.
- Sensibilidad dental: suele ser provocada por la retracción de las encías y/o el desgaste de la superficie dental.
- Periodontitis: Es la causa principal de pérdida de dientes en los adultos. Se produce cuando una inflamación o infección en las encías (gingivitis) que no ha sido tratada adecuadamente se extiende a los ligamentos y el hueso que anclan el diente y los debilita. Esta pérdida de soporte puede provocar que los dientes se aflojen y, finalmente, acaben cayéndose.
- Caries: que pueden atacar tanto a raíz como al esmalte de los dientes.
- En el caso específico de las mujeres, los cambios hormonales provocados por la menopausia y la postmenopausia también suelen ser factores determinantes en la debilitación de la salud bucodental, por lo que es importante prestar especial atención a la salud bucodental en esta etapa.
Consejos para que a tu sonrisa no le pesen los años:
- Mantén una higiene dental diaria y cuidadosa, lavándote los dientes tres veces al día y empleando sedas o cintas dentales en las zonas de difícil acceso como los espacios interproximales.
- Bebe mucha agua: te ayudará a generar saliva y a remediar la sequedad dental.
- Para prevenir la sensibilidad dental, evita los alimentos ácidos y aquellos malos hábitos que pueden favorecer la erosión y el desgaste del esmalte, como morder palillos. Elige dentífricos y colutorios con nanopartículas de hidroxiapatita que se integran en el esmalte dental formando una capa protectora que te ayudará a prevenir la sensibilidad dental.
- Utiliza dentífricos poco abrasivos que reduzcan los radicales libres y cuiden las encías, como VITIS antiage.
- Sigue una dieta sana y equilibrada que se rica en vitaminas A, E y C, presentes en frutas y vegetales, quesos, nueces y semillas: te ayudarán a fortalecer tu mucosa bucal.
- Elige un cepillo que se adapte a tus necesidades. Es importante que los filamentos tengan los extremos redondeados, ya que de esta forma respetarán el esmalte y las encías. Si no tienes una buena técnica de cepillado o eres muy exigente con tu higiene bucal, una buena idea es utilizar los cepillos eléctricos, como VITIS sonic, que te ayudarán a lograr una limpieza más profunda con menos esfuerzo. Y sea cual sea tu cepillo, asegúrate de renovarlo cada tres meses para que sus filamentos estén siempre en óptimas condiciones.
- Una visita al odontólogo durante el periodo de la menopausia te permitirá averiguar si sufres bruxismo, una dolencia que es habitual en ese periodo, y buscar una solución al problema.
- Ayuda a mantener la salud de tus encías usando una vez al día un colutorio específico que las proteja y revitalice, como VITIS encías.
- Si usas prótesis dental, cuídalas limpiándolas diariamente con productos específicos como el cepillo VITIS prótesis o la solución efervescente de limpieza VITIS orthodontic comprimidos.
- Visita a tu odontólogo cada seis meses: el especialista será tu mejor aliado para mantener tu sonrisa joven durante mucho más tiempo.